Me gusta decir que más allá de las creencias, es decir, cuando trasciendes tus convicciones acerca de lo que son las cosas y tu propia personalidad, es dónde empieza lo que se suele llamar espiritualidad.
A muchas mentes racionales, la palabra en cuestión ya les rechina y rechazan profundizar en el concepto como si todo lo relacionado con el tema fuera superchería o dogma. A mi me pasaba. Los conceptos, lo que tienen, es que su significado es una mezcla tal de creencias que no se abarcan con una sola definición, así que solemos hacer la primera asociación que nos viene a la cabeza y relacionamos la espiritualidad como si en si misma fuera un dogma y/o que tiene que ver con practicar alguna religión. Normal, las iglesias se han hecho dueñas de muchos conceptos, adaptándolos a que sus verdades son las únicas.
Pero la espiritualidad, tal y como la entiendo ahora, es una dimensión de cada cual, que no está en absoluto reñida con la razón. Las religiones establecidas no tienen el monopolio, y en la que los dogmas no sirven más que para descubrir de dónde surgieron y comprender más acerca de nosotros. A propósito, me encanta una frase que se atribuye a Gandhi cuando le preguntaron acerca de qué fe profesaba: "Dios no tiene religión. Yo tampoco".
Pero la espiritualidad, tal y como la entiendo ahora, es una dimensión de cada cual, que no está en absoluto reñida con la razón. Las religiones establecidas no tienen el monopolio, y en la que los dogmas no sirven más que para descubrir de dónde surgieron y comprender más acerca de nosotros. A propósito, me encanta una frase que se atribuye a Gandhi cuando le preguntaron acerca de qué fe profesaba: "Dios no tiene religión. Yo tampoco".
Tod@s tenemos ideas acerca de cómo somos, convicciones a las que llamamos personalidad. Si nos preguntan quién somos, contestamos con un nombre, una profesión, algún rasgo de nuestro carácter, pero ¿dejarías de ser tú si te cambias de nombre o de profesión?, ¿y el carácter? también puede cambiar a lo largo de nuestra vida, por tanto tampoco es un punto determinante para definirnos. Me encuentro con la memoria, la única que atestigua que hemos sido nosotros en todas las etapas aunque hayamos cambiado, pero ¿y si la perdemos? Entonces ¿sólo somos un acúmulo de memorias?
Total, empezar a comerse la cabeza para ir descubriendo lo que uno realmente es, o mejor dicho, tener la intención de encontrar las respuestas es el comienzo de lo que para cada uno es su camino espiritual.
La intención de búsqueda de lo "inamovible" de un@ mism@ y la de encontrar el sentido se da en gran parte de la gente a raíz de una crisis personal. Es cuando descubres que has estado eligiendo mal durante mucho tiempo, ahí es cuando las bases de tus decisiones se tambalean y tienes que trascender las convicciones acerca de cómo creías que eran las cosas (la amistad, el amor, el trabajo, las relaciones, tú mism@, la vida, tu vida). Por eso digo que el camino espiritual comienza cuando te atreves o necesitas profundizar más allá de tus creencias y empiezas el camino de conocerte, y vas descubriendo... encontrando el orden detrás del caos, tomando conciencia de tu grandeza a la vez que de tu pequeñez... y seguir intentando mantener el equilibrio... : )
Creo que realmente lo que hacemos es bucear en nuestro subconsciente, solo que no sabemos CUÁNTO abarca.
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