Acción
y reacción ¿A qué nos suena? A mi me suena a
frasecita apropiada para hacer un chiste en una situación en la que
suele pasar que la reacción es desproporcionada o inesperada, es
entonces cuando nos damos cuenta de que ha sido "por causa de", pero,
por lo general, no nos percatamos de que es algo que ocurre
constantemente. Acción y reacción es el epígrafe de una de las leyes
universales, toda causa tiene su efecto y todo efecto tiene su causa, y todo en el universo está sometido a esa ley, entre otras claro. Pero, ¿cómo nos afecta en concreto a los humanitos de este mundo?
Pues de infinidad de formas, muchas se nos escapan aunque hay otras
que podemos reconocer perfectamente, por ejemplo, lo que comemos. Con
nosotros mismos podemos empezar por la homeostasis, esto es el
mantenimiento del equilibrio entre los diferentes intercambios de
sustancias que se producen en el cuerpo (si comemos esto, nos pasa esto
otro, si hacemos ejercicio o no, también tiene sus correspondientes
reacciones). También se cumple en cuanto a lo que pensamos, y si, por
ejemplo, nos preocupamos en exceso, lo notaremos.
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Pero a lo que voy realmente, es que también es una regla que se cumple en nuestras relaciones con los demás.
Cuando interactuamos con alguien, el cómo sea y se desarrolle la
situación SIEMPRE dependerá de ambas personas, igual que en un grupo,
pero empecemos por lo facilito...
Si
miramos las relaciones como si fueran una especie de danza, nos daremos
cuenta que cada una de las relaciones que establecemos tiene su propio
ritmo particular, y tiene sus propias pautas (la frecuencia de los
contactos, la intensidad emocional, la confianza, el respeto...). Nos
comportamos con las personas, por lo general, tal y como se comportan
con nosotros... ¡pero a todos nos pasa lo mismo! y todos pensamos que
reaccionamos ante el mundo obviando que también el mundo reacciona ante
nosotros.
¿Y
para qué esto? Para darnos cuenta de que esas relaciones son así con
nuestra participación, de que, en ese baile, el ritmo también lo llevas
tú, y cuando un baile no nos gusta como va, podemos decidir cambiar los
pasos.
Como
siempre, esto es algo que ya hacemos de manera natural, si no nos gusta
como es el trato con alguien solemos hacer algo para intentar
cambiarlo... lo malo es cuando intentamos que cambie el otro. Puedes
intentarlo e incluso conseguirlo... ¿y mantenerlo? Cambiar
comportamientos que no sabemos de dónde nos vienen lleva un trabajo que
nadie va a hacer por que otro se lo pida (ni tú), lo más normal es que
"la cabra tire al monte" y al cabo de un tiempo la relación (del tipo
que sea) retome un cauce conocido.
Entonces
se trata de cambiarlos con conciencia, en descubrir cómo exactamente
contribuimos a que la danza sea como es y entonces nos daremos cuenta en qué pasos tenemos que cambiar el ritmo
para que la danza sea más fluida, o bien elegir dejar de bailar.
Fijarnos en los movimientos que no nos agradan del baile y descubrir por
qué no nos agradan nos llevará a un conocimiento más profundo de
nuestro baile y a decidir mejor con quien queremos bailar.
Los
demás son una oportunidad constante de irse conociendo a uno mismo.
Solo cada uno puede decidir por si mismo si quiere cambiar algo dentro
de si. Pero recuerda, antes de una reacción hay una acción... y así
vamos construyendo la vida.
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